domingo, 25 de marzo de 2012

Woman - 1913 - Erich Heckel

Woman - 1913 - Erich Heckel (b Dobeln, nr Dresden, 31 July 1883; d Radolfzell, nr Konstanz, 27 Jan 1970).

miércoles, 7 de marzo de 2012

Milena Berlatzky



Quinqué o Los ácidos sueños


libélulas fluorescentes
malabarear cuchillos sin sueños esponjosos
mariposas incognoscibles prestidigitan caleidoscópicas formas de nubes
el agua cae en gotas concéntricas
llorar en año nuevo no es buen presagio
los herbajes oceánicos olvidan sus flores
los ojos de azul elíptico comienzan a desviarse
se oye un corazón crujir en braille
despertar en el fondo de una cisterna celeste
Alguien golpea la puerta

Silencio
Puede ser la muerte


sábado, 25 de febrero de 2012

reynaldo uribe



IV

Quiero conservar el culto
primitivo y ancestral
ante lo mágico:
lo que no es del hombre
y hace al hombre.

Por eso busco y necesito
al hombre esencial,
el de carne y huesos
pero con un armazón de acero
o de nieve
de fuego o agua dulce
o lo que sea,
el que guarda en sus más recónditas esquinas
el Innombrable:
en sus miradas más superficiales
en sus manos y en sus pies
y en cada poro de su piel,
el que convive
y lo alimenta y se alimenta.

Por eso
mi temor de negociar
el gusano que un día se hizo hombre
por el hombre
que cada día quiere hacerse más gusano.
Estoy cansado
de buscar al hombre
tumultuoso y cerebral
laberíntico y mortal
el de carne y hueso y nada más

y nada más.

viernes, 24 de febrero de 2012

¿Tus palabras no atraviesan las paredes?

¿Tus palabras no atraviesan las paredes?
Modifica tus palabras.

Vicente Luy


[Lectura de Poesía] Blanc - Pontoni - Monti


entre ríos - la paz - parque municipal la curtiembre - 18/02/12

Guillermo Ibáñez - Poema de amor


I

Por vos que sos
como brisa de mediodía
compañía de guitarra
silencio de ocaso
como culminación de rito sagrado
constelación que abarca el universo
sombra y agua para el caminante del desierto
vestal en los corredores del infierno
ángel entre las nubes del cielo
que sos como un pequeño río
sin profundidades ni turbulencias
fugaz en la presencia de la piel
eviterna en todas las memorias
aún en aquella de mi muerte
y camino inaugural de la esperanza.


más

martes, 31 de enero de 2012

EMMA BARRANDEGUY


UN  HOMBRE


                              Las costas verdes, los sarandizales,
                              el mostrador donde acodabas tus hazañas,
                              aquellas suelas y el martillo curvo.
                              Las pieles de las nutrias,
                              la manta, testimonio de esa fiebre
                              que trajiste del norte.
                              El machete triunfal sobre las pajas,
                              las redes viejas junto a tus polémicas,
                              la canoa prestada y los anzuelos,
                              la cuadra de batatas que dejaste sembrada,
                              hoy no se hacen presente en tus pupilas,
                              entran al territorio del recuerdo.

                              Porque la vida de un hombre,de un loco,
                              de un rebelde,
                              de un disconforme eterno,
                              de un hombre que no supo hacer dinero
                              pero sí caminar, conversar, beber,
                              estar en desacuerdo
                              y desatárselo en palabras a la gente,
                              porque la vida de un hombre como tú, digo,
                              no es mas que esto:
                              una enumeración de circunstancias,
                              el recuerdo de un proceso,
                              una barba crecida, un hijo muerto,
                              unos ojos brillantes,
                              gajos del Gualeguay entre los remos.

                              En el agua tenías que morir,
                              no hay que asombrarse.
                              Tendiendo redes en la noche,
                               para pescar por fin
                               tu corazón inquieto.

                                    EMMA BARRANDEGUY 

Las Puertas, 1964.

lunes, 23 de enero de 2012

Enrique Zolo

Confesiones a solas

Creo que estuve en este lugar; las sensaciones electrizan. Fuera del mundo las latitudes se tejen.
Corrompiendo silencios, este infierno parece tan poca cosa; entre sombras sin voces, estoy a punto de agarrarme a algo.
Las cartas estan manchadas de vino, agrio perfume narciso.
Siento que el temblor ya no me sostiene. La represión esta a la vuelta de un sueño.
La muerte esta celosa; solo son figuraciones entre gritos. La alegría está ebria en un rincon olvidado.
Todo fue un juego que empezo ayer. Creo que estuve en este lugar, entre sombras sin voces.


Lucidez silenciosa

Invierno desangra,
promulga silencio.
El cielo cuajado de incierto
abre los portales del alma,
hace cantar al soñador reprimido.
Demasidas luces,
demasiadas sombras,
lucidez silenciosa.
la noche recoge sus frutos,
lubrica las lujurias.
Invierno desangra
promulga silencios.


Acerca del Alma 

Veo una radiografia de la ciudad, y los asaltantes del paraíso rompen el delicado equilibrio en este territorio en penumbras donde el silencio, que no termina, hace que este libro de arena se me escape de las manos.
El futuro ya se fue y la gente como si nada se pierde en la boca de los subtes, y lo que no se nombra se dice en silencio, detrás de los jardines del olvido. La ciudad ausente enciende las luces y este cuaderno de arena se desgrana y los mapas de los espejos se confunden en este sentimiento hecho carne. Veo la radiografia del mundo y otro vuelo de magia se pierde con un soplo de sombras que se lleva el silencio.
El tiempo no para y este sentimiento sagrado ya no quiere recordar el sentido de esto, y lo que nombra sobrevive, lo que calla explota, en otros sentidos.

miércoles, 4 de enero de 2012

Regresos * MARTA ZAMARRIPA

Sonríe ahora
como si regresara de una rosa.
Su cabeza
derrama juventud sobre la almohada,

¿Sueña acaso,
o desviste jardines?

Afuera, la noche se afirma,
derrama su piedad,
nos cobija.

viernes, 7 de octubre de 2011

Restos



Queda un jardín
territorio de alimañas


un mar de florcitas salvajes
resiste.


Quedan los fragmentos de un libro luminoso
adheridos por la lluvia
a lo que fue una silla de espera


resquicios de un color
en la quietud de los rincones


signos de la luz


señales en la tierra


restos de una civilización personal
que se niega a desaparecer.


EDGARDO ZOTTO